El Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) aumentó la tasa máxima de interés que las entidades financieras pueden cobrar por los préstamos de consumo y a micro y pequeñas empresas (mypes) en soles, de 96.3% a 101.86%.
Esta medida, que entrará en vigencia el próximo 22 de noviembre, busca evitar que la Ley de la Usura, aprobada por el Congreso en 2021, siga excluyendo del sistema financiero a personas con mayor riesgo de impago.
La Ley de la Usura estableció un tope de 83.4% para las tasas de interés de los créditos, con el objetivo de proteger a los consumidores de los abusos de las entidades financieras. Sin embargo, este tope ha tenido el efecto contrario, provocando que más de 220,000 personas se hayan quedado sin acceso al crédito formal.
Según la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS), la mayoría de estas personas se han visto obligadas a buscar préstamos informales, como el “gota a gota”, que son mucho más costosos y peligrosos.
El aumento de la tasa máxima de interés permitirá que las entidades financieras puedan compensar los costos de los préstamos a personas con mayor riesgo de impago, lo que podría contribuir a reducir la exclusión financiera.
Beneficiados
Según Walter Leyva, docente de Esan, los principales beneficiarios de esta medida serán personas de zonas rurales, de los sectores agrario, artesanal, transporte, y de áreas urbanas que lindan con la informalidad, así como jóvenes trabajadores que carecen de historial crediticio.
“Es probable que los alcance a los jóvenes. El sistema financiero busca estabilidad. Se pide seis meses de ingreso a través de sueldo o estabilidad laboral. Esto permitiría que segmentos nuevos también puedan acceder a productos crediticios para capital de trabajo en emprendimientos, para consumo en nuevas familias”, resalta.
En conclusión, el aumento de la tasa máxima de interés de los créditos es una medida necesaria para evitar que la Ley de la Usura siga excluyendo del sistema financiero a personas con mayor riesgo de impago.